Al fiscal Irving Barrios Mojica: El permanente desencuentro con la sociedad
OBSERVATORIO
Antonio Rosario
Pasaron varias décadas y la ahora Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas que usted encabeza, continúa abismalmente distanciada de la sociedad que demanda justicia urgentemente.
El caso que nos ocupa, todo un disparate, del que tienen datos copiosos sus colaboradores más cercanos, hace alusión a la negación no sólo psicológica de diversos agentes del ministerio público y de no pocos torvos sujetos que inexplicablemente les han dado el nombramiento de “policías investigadores”.
Sucede que en medio de esta paradoja y trama ya no oculta, que lejos de procurar justicia amenaza la integridad de las y los tamaulipecos, la decrepitud, degradación y descomposición de la FGJET, que parece insalvable, es lo único visible.
Tres agentes del ministerio público y varios policías investigadores, que suponen que a cualquiera pueden agraviar y perjudicar, son la historia negra de la que a estas alturas usted ya debe estar informado, si a su Jefe de Prensa no se le ocurre ocultarle esta información.
Uno de esos policías es mujer y tiene por costumbre rentar casas cuyos deudores están tan emproblemados con el INFONAVIT, que han decidido abandonar las viviendas.
Esta persona, que haciéndose pasar como la “propietaria” de esa casas, así lo declara en la carpeta de investigación, y alardea que ella está protegida por sus jefes de la Comisaría, ya perdió recientemente un juicio civil por el mismo caso y fue descubierta mintiéndole además a las autoridades judiciales, ya no sólo a las ministeriales, empeorando la crisis de legitimidad y desconfianza que entrecruza las de por sí enlodadas relaciones entre la Fiscalía a su cargo y el pueblo de Tamaulipas.
¿ESTÁ USTED EN CONTRA DEL GOBERNADOR?
No permita, Fiscal Irving Barrios, que las cosas se le desborden por la corrupción asfixiante que acabará por salpicarle en su cara si no mete orden, disciplina y castigos ejemplares.
Échele ganas como lo hizo con el Fiscal Anticorrupción y demuestre que hasta su nivel no llegan los corruptos que moviéndose en la pirámide de su Fiscalía, específicamente en su base, maniobran y hacen pingües negocios como si se manejaran en un mundo ajeno al de la ley.
Si usted está de acuerdo en la reconstrucción política y social que ha emprendido con toda seriedad el Gobernador Américo Villarreal Anaya, impida que la tragedia lo lleve al banquillo de los acusados, porque si fuera por esa gente, parte sustancial de mi breve narrativa, nada les importaría que usted fuera a parar a la cárcel.
Si no es así, daremos por hecho que usted está en contra de la justicia que ha prometido llevar a cabo Américo Villarreal Anaya, por lo que la FGJET sería para la 4T una dependencia amenazante, desafiante, peligrosa y enemiga del Gobierno del Estado de Tamaulipas. Y de nosotros también.
“POLICÍAS” EMBOSCAN Y EXIGEN DINERO A LA GENTE
Sus colaboradores también están bien informados en que en una de las casetas de acceso al centro de justicia emboscan a la gente que va en busca de resolver sus conflictos legales.
Ahí les exigen dinero a cambio de permitirles el acceso a consultar el curso de sus carpetas de investigación.
Lo supo puntualmente su Jefe de Prensa, Rodrigo Iván Moyle Santamaría, quien pidió el beneficio de la duda para él y estar en condiciones de atender el caso, pero sólo dejó tras de sí una bomba mediática que habrá de estallarle a usted en su oficina.
Esta es una trágica historia de fiscales que no conformes con las pruebas contra servidores públicos delincuentes de su Fiscalía, se atreven a no proceder con todo el rigor de la ley.
Ha de creer, pobre gente, que quien peca en silencio no peca, sino sólo hasta que sus acciones se vuelven públicas, como pasa aquí, porque sólo así se vuelven acciones criminales y pecaminosas, antes no porque eran encubiertas por la impunidad, la mentira, el abuso de poder y la falsa moral.
antoniorosarioh@hotmail.com