El Presidente más pobre del mundo

José Alberto Mujica Cordano, conocido popularmente como Pepe Mujica (n. Montevideo, Uruguay; 20 de mayo de 1935), []es un político, actual presidente de la República de Uruguay.

Desde el 2005 está casado con la senadora y dirigente histórica del Movimiento de Participación Popular, Lucía Topolansky, tras una prolongada convivencia.

A raíz de un artículo del diario conservador  ABC  de Madrid,  titulado “Mújica el Presidente más pobre”, he tenido más noticias del buen hacer  de una persona que al ser elegida  como  Presidente de Uruguay, ha rechazado todos los privilegios  inherentes a  su cargo y se ha dedicado en cuerpo y alma a servir a su pueblo, desde la sencillez y humildad con la que se ha  caracterizado toda su vida.

Gratifica el ejemplo que está dando este hombre, más bien diría “Santo Varón”,  para vergüenza de la mayoría de políticos a nivel mundial y en especial de los incapaces y corruptos que tenemos en casa.

 

Disfruten de esta noticia y de la respuesta que dio a la misma  e imagínense  las acciones que podríamos emprender para solucionar nuestra “crisis”.
Con soluciones “a lo Pepe Mújica”, no estaríamos en crisis por dos motivos :
Uno, porque los políticos tendrían que vivir con muy poco .

Y dos,  porque nosotros el pueblo también sabríamos o deberíamos vivir con menos.

La Nota de ABC dice lo siguiente:

Vive en su chacra de las afueras de Montevideo, en Rincón del Cerro, tal como había prometido. Lo rodea su esposa, la senadora Lucía Topolansky, la inseparable perra Manuela –nada de raza, nada de abolengo canino-, sus cultivos y mucho verde. Eligió para quedarse el lugar en el mundo que encontró hace años y le atrapó.

Desde allí dona a fondos de ayuda social un 90% de su salario, establecido en unos 12.500 dólares americanos. Cada mes, ‘Pepe’ Mujica recibe 250.000 pesos por su tarea como Presidente del Uruguay y Comandante en Jefe, pero de allí sólo rescata para su manutención mensual unos 20.000 pesos. El resto se distribuye desde el Fondo Raúl Sendic, que administra su fuerza política, el Movimiento de Participación Popular, que ayuda a emprendimientos productivos hasta simples colaboraciones, y ONG que colaboran con viviendas. Dice a los cuatro vientos que “con ese dinero me alcanza, y me tiene que alcanzar porque hay otros uruguayos que viven con mucho menos”.

Es el mismo que propone donar las jubilaciones presidenciales –esas astronómicas cifras que permanecen cobrando los ex presidentes constitucionales del país- y el mismo que utiliza un simple Chevrolet Corsa como vehículo de transporte oficial. A muchos años de la moto Vespa que utilizó para llegar al Parlamento a la salida de la dictadura, ya ungido como diputado, Mujica ha mantenido su perfil. Más acicalado que en épocas de proselitismo político, igualmente el protocolo es algo bien alejado de sus intenciones habituales.

El último ejemplo lo ubicó en la ferretería del barrio Paso de la Arena, hacia donde fue para adquirir una tapa para inodoro. Compró lo que iba a comprar, y acto seguido aceptó una invitación informal de los jóvenes de la zona, nucleados en el humilde club de fútbol Huracán. Sin seguridad, sin eufemismos, Mujica brindó una sencilla charla de aliento a los futbolistas que participan en el torneo de la Segunda División Profesional… aferrado a la tapa del inodoro recién adquirida.

De repente un Volkswagen Fusca, celeste, muy bien conservado, llegó a estacionarse frente al gimnasio del club. De alpargatas, con equipo deportivo, el Presidente dedicó varios minutos a los jóvenes deportistas, y prometió mayor atención a la institución además de convenir en “comer un asadito si el club asciende a Primera”. Se sacó fotos, aceptó fotos, concedió abrazos y se fue con el aplauso de todos, abrazado a su perra Manuela que a estas alturas del mandato ya entiende de absolutamente todos los temas.

Ya de regreso a su chacra –esa finca que a lo lejos es custodiada por efímeras fuerzas policiales aceptadas a regañadientes por el mandatario uruguayo- Mujica continúa con su día. Revisa la tierra, mientras declara su auto VW Fusca como único patrimonio, valorado en 1.945 dólares.

De acuerdo a la última declaración jurada que presentó a la Junta de Transparencia y Ética Pública, Mujica sólo es dueño de este coche, mientras la chacra figura a nombre de la primera dama y senadora Topolansky, la cual también dona parte de su salario. Sin cuentas bancarias, sin deudas, el hombre dice dormir tranquilo, y asegura que espera culminar su mandato para descansar, más tranquilo aún, en su chacra de Rincón del Cerro.

Cuando el presidente Mujica fue consultado por los medios acerca de esta nota, esto fue lo que contestó:

“Yo no soy pobre, pobres son los que creen que yo soy pobre.

Tengo pocas cosas, es cierto, las mínimas, pero solo para poder ser rico.

Quiero tener tiempo para dedicarlo a las cosas que me motivan. Y si tuviera muchas cosas tendría que ocuparme de atenderlas y no podría hacer lo que realmente me gusta.

Esa es la verdadera libertad, la austeridad, el consumir poco.

La casa pequeña, para poder dedicar el tiempo a lo que verdaderamente disfruto. Si no, tendría que tener una empleada y ya tendría una interventora dentro de la casa. Y si tengo muchas cosas me tengo que dedicar a cuidarlas para que no se las lleven.

No, con tres piecitas me alcanza. Les pasamos la escoba entre la vieja y yo, y ya, se acabó.
Entonces sí tenemos tiempo para lo que realmente nos entusiasma.

No somos pobres”.

Soy feliz porque siento amor por la humanidad
Siento amor porque vivo en amor a mi pueblo
Tengo de todo porque no necesito más de lo que requiero para ser feliz
Comparto lo que tengo porque nunca me sobra, pero alcanza para todos
Vivo con mi vieja y no necesitamos más de lo que nuestro esfuerzo nos repara
Soy feliz por el amor que siento
Y porque cada día el verde es más verde
El rojo más intenso
El azul más esplendoroso
Y el hombre, el ser, cada día despierta más mi ilusión por vivir.
Amo y me amo
No soy pobre… el dinero no es mi Dios
Mi Dios es la emancipación…

 

JOSÉ MUJICA, UN PRESIDENTE AHORA ADMIRADO PERO CON OSCURO PASADO

Por Carlos Vilchez Navamuel

De pronto, el presidente uruguayo, José Mujica Cordano aparece en las redes sociales como un ejemplo de persona y de presidente a seguir, todo porque semanas atrás se divulgó una información acompañada de una foto al lado de su viejo “vocho” y cuyos titulares decían que José Mujica es el presidente más pobre del mundo.

Entre esta información que apareció en todos los periódicos internacionales se decía: “De acuerdo a un estudio, el sueldo del presidente José Mujica es de 12,500 dólares mensuales, una remuneración elevada por su cargo de funcionario público. Pero Mujica dona el 90% de sus ingresos a fondos de ayuda social, lo que lo deja con alrededor de 1,250 dólares para sus gastos personales.”

“Con ese dinero me alcanza, porque hay otros uruguayos que viven con mucho menos”, dijo Mujica en entrevista con el diario español, El Mundo. La esposa del presidente, Lucía Topolansky, también dona parte de su salario a esta causa.” José Mujica, “el presidente más pobre del mundo” como ha sido llamado por algunos, vive en una granja junto a su esposa en las afueras de Montevideo, en Rincón del Cerro.

Mujica se mostró conforme con la vida que lleva y aseguró que prefiere mantener “la vida de siempre, en una casa sencilla, con la ropa y los amigos de toda la vida”.

http://www.abc.es/20120609/internacional/abci-mujica-presidente-pobre-mundo-201206081647.html

Lo anterior resulta admirable y puede hacer pensar a algunos que es un ejemplo para aquellos otros gobernantes que viven rodeados de lujo y opulencia.

Sin embargo debemos recodar que no toda su vida fue ejemplar; muchos ignoran que el señor Mujica tuvo una vida pasada oscura, de violencia, asesinatos y cárcel. Mujica fue, junto con Raúl Sendic, fundador del Movimiento de Liberación Nacional, más conocido como los Tupamaros, un grupo de izquierda radical que mantuvo la guerrilla urbana durante varios años. Mientras “el Pepe” (como le gusta que le llamen) militó en el grupo de los Tupamaros utilizó otro nombre, José Antonio Mones Morelli, el nombre de guerra así como el alias de “Emiliano”.

http://www.lahistoriaparalela.com.ar/2009/09/13/%C2%BFquien-es-jose-%E2%80%9Cpepe%E2%80%9D-mujica-o-jose-antonio-mones-morelli/

Wikipedia nos dice que Mujica fue apresado cuatro veces y que en dos oportunidades logró fugarse de la cárcel de Punta Carretas. “En total, Mujica pasó casi 15 años de su vida en prisión. Su último período de detención duró trece años, entre 1972 y 1985, siendo particularmente duro.” Nos dice además que el ex guerrillero Mujica “Salió en libertad, beneficiado por la Ley 15,737 del 8 de marzo de 1985, que decretó la amnistía de todos los delitos políticos, comunes y militares, conexos con éstos.”

http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Mujica

Toda esta experiencia al parecer transformó al “Pepe” que luego se metió a político, fundó un partido, fue diputado, ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca y el 01 de marzo de 2010, este ex convicto y guerrillero se convirtió en el presidente de Uruguay.